Dependiendo de la zona del cuerpo que ha sido sometido a cirugía y del tratamiento que el paciente ha tenido que seguir después de la operación, influyen en el tipo e intensidad de yoga que se le puede ofrecer al practicante.
Por eso es importante practicar yoga con un profesor que tenga mucha experiencia, conocimiento en diferentes tipos de yoga y preferiblemente formación en yoga oncológico.
En este tipo de yoga adaptamos la postura (asana) al paciente/practicante y no al revés como se suele hacer normalmente en una clase de yoga normal.
Para poder adaptar las asanas al practicante trabajamos con soportes como sillas, bloques, bolsters, cojines, mantas, cinturones, pelotas de tenis.... y un largo etc. Si no conoces lo que son bolster, bloques o qué tipo de soportes escoger, aquí te dejo un vídeo que espero te pueda ayudar.
Muchas posturas se trasladan al suelo y se busca variaciones para poder obtener el mismo beneficio de la postura desde otro punto de partida.
Generalmente los pacientes de cáncer que se acercan al yoga oncológico, muchos de ellos ex practicantes de yoga que quieren retomar su práctica pero no saben qué posturas pueden hacer, se quedan sorprendidos de la cantidad de posturas que sí pueden hacer. Son pocas posturas que eliminamos del todo de la práctica de un paciente de cáncer, pero las hay y es importante saber qué se puede hacer y qué no, y sobretodo porque.
En algunos casos, como pacientes de cáncer que desarrollan linfedema en un brazo o pierna, tenemos que ser algo más restrictivos y eliminar posturas sobre los brazos o de pie.
Si entiendes castellano, tienes a tu disposición grabaciones de yoga oncológico para hacerlas en diferido en este link.
En caso de dudas sobre este tema, siéntete libre de contactarme via email en cualquier momento. Será un placer guiarte y ayudarte.
Nagore.
www.yogaconnagore.es
yogaconnagore@gmail.com