¿Qué es el yoga oncológico?

El yoga oncológico es un tipo de yoga que se adapta a las limitaciones físicas que un paciente de cáncer pueda tener debido a su diagnóstico, la cirugía a la que ha sido sometido y el tratamiento a seguir después de la cirugía. Es un yoga muy personificado y enfocado en cada limitación física que un paciente pueda tener.

Dos pacientes de cáncer con la misma patología no necesariamente pueden realizar la misma práctica de yoga. A priori parece que sí, pero las necesidades y limitaciones de cada uno como consecuencia, muchas veces también de la tolerancia de los fármacos y sus efectos secundarios, son muy diferentes en cada paciente. 

Una clase de yoga oncológico es la combinación de muchos tipos de yoga a la vez. A veces cogemos posturas del yoga restaurativo, otras del yin, otras del hatha....etc. Por eso un profesor especializado en yoga oncológico necesita tener formación específica y un amplio conocimiento del yoga y estilos de yoga, para poder adaptar las posturas al practicante. 

Es frecuente que en una clase de yoga oncológico no todo el grupo realice la misma postura de la misma manera. Esto quiere decir, hay practicantes que harán la postura sentados, otros de pie. A veces incluso habrá practicantes que aborden la postura incluso tumbados. Por ejemplo, si un paciente de cáncer está en pleno tratamiento oncológico de quimioterapia, es posible que sienta malestar o nauseas. A este tipo de practicante de yoga se le propondría realizar más posturas de suelo que de pie. En cambio a un paciente de cancer que sufre un linfedema no le propondríamos posturas en las que haya que sostener peso con las manos o los brazos y se buscarían alternativas.

El objetivo en cada practicante es el mismo; rehabilitar su estado físico, descontracturar músculos en la zona operada o radiada, trabajar la flexibilidad y la fuerza perdida por la falta de ejercicio físico durante el tratamiento, calmar la mente y elevar la energía. Pero también gestionar emociones que pueden estar estancadas o no procesadas.

Además, en el yoga oncológico encontramos una red de apoyo entre pacientes con quien poder empatizar y compartir experiencias. Un grupo de personas que nos entienden muchas veces mejor que nuestras propias familias. En yoga oncológico dejamos de ser un bicho raro a ser uno más. 

El yoga oncológico es mucho más que yoga. Es un tiempo de autodedicación para sanar a todos los niveles, a nivel físico, a nivel mental y a nivel emocional. Es una herramienta para toda la vida.

Namasté!

Pd. Si tienes alguna pregunta al respecto, no dudes en contactarme: yogaconnagore@gmail.com